Pbro Lcdo Pedro A Moreno U
Al pie de la Sierra Nevada y al murmulla del río,entre privaciones y estrecheces,pero con la riqueza y abundancia del espíritu de Dios recibió la llamada al servicio del templo en la escuela de Don Hildebrando Torres de la Parroquia El Pbro Antonio Ignacio Porras seleccionó al caballerito que iría al Seminario de Mérida y entraría el mismo día en que su coterraneo Roberto Dávila Uzcátegui,hoy obispo de Apure.
Los RR PP Eudistas entonces directores el Seminario moldearon a Crescencio ,que hoy ven llegar a los 25 años de sacerdote y participan de su regocijo,los que fueron su rector P Maubre y su profesor RH evaristo Jerez, cumplieron su formacion en la filosofía y teología los RR PP Jesuitas en el Seminario interdiocesano De Caracas,donde se mostró activo catequista y peocupado por las labores pastorales de la capital.
Fue el Pbro Rafael Lamus el anfitrion y de la ordenación y primera misa por encontrarse la residencia del misacantano en la Hacienda de Campo de Oro a donde concurrieron los familiares y amigos de la Parroquia San Miquel Del Llano.
Era costumbre del Ecmo Sr Arzobispo Acacio Chacon enviar alos sacerdotes jóvenes a las parroquias mas lejanas y dificiles por razones de aprendisaje rural y fortalecimiento de la voluntad,ademas de dar justo relevo a las generaciones .En esta forma había como un estimulo a los veteranos que iban pasando a la ciudad.Por estos motivos el nuevo sacerdote ordenado el 30 de sptiembre de 1956 esenviado por seis meses de vicario cooperador a Tovar y luego a Canaguá.
INTEGRA EL EQUIPO PASTORAL
En los pueblos del sur del estado Mérida existió por esos tiempos un equipo sacerdotal formados por los párrocos de Guaraque Cananguá,Mucuchachí,Mucutuy, Aricagua y El Morro.Son famosas las historias de nuestros héroes anónimos.Las cabalgatas que dieron animación artísticas a los pueblos.Famosas e históricas las concentraciones campesinas para la aperura de los caminos carretero,como las cayapas de curas para las confesiones en las fiestas patronales.Ya eran conocidas las hazañas de Vicente Alarcon para llevar el primer jeep a Guaraque, de Eustorgio Rivas a Canaguá, de Boanerges Uzcátequi al Morro y alli engrosaría la lista Crescencio Parra,como pionero en la carretera de Mucutuy y Mucuchací,su primera parroquia.Durante tres años lucha denodadamente para superar las dificultades económicas y sociales de un pueblo que estrena una vía de comunicación y lo hace por su proío esfuerzo. Unas veces con su guitarra ,otras con su acordeon,siempre con su voz cantante va sembrando la alegría sacerdotal entre los jóvenes campsinos.Florecía de esta manera La Legión de María , las ligas agrarias,las cooperativas ,pero ante todo expandía la palabra de Dios.Con breves pasatías por las parroquias de Mesa Bolivar,Pueblo nuevo, Santa Bárbara de Mérida,vuelve enraizar en las lejanas tierras de Santa María de Caparo,donde durante cuatro años se dedica al apostolado de aquella agreste región y deja un templo y una casa parroquial como asiento de labor cristiana.Hoy en dia esta porción de Mérida es un emporio de riqueza y esperanza de los Andes por la represa Uribante -Caparo que ha cambiado el aspecto socio económico de la población.
Muchos hombres experimentan el deseo de la novedad,la necesidad de lanzarse hacia lo desconocido,conquistar picachos innaccesibles y ese deseo entraña una esperanza.Los creyentes que seriamente refexionan en su fe,se plantean inquietudes .Se podran encontrar nuevas rutas ,inexplotadas para llegar aDios ? se podrá experimentar el amor a Jesucristo distinto al vivido por las generaciones precedentes? ¿Cómo en Dios en el siglo de la técnica y de la ciencia ? La vida cristiana debe trancurri en la monotonía o en elentusiamo.Con estas ideas leidas o escuchadas a algun carismático llega Crscencio Parra a Mucuchíes desde la población de Chiguará,donde habia ejercido el ministerio sacerdotal durante tres años.Pero quería un riesgo en el páramo,iba a experimentar una nueva pastoral con enruanados.Con la Biblia en una mano y la guitarra en la otra lo vieron los mucuchiseros durante seis años fundando grupos de oración en cada aldea. El calor del aguardiente fue cediendo el paso al calor de la oración comunitaria de los hermanos que aplaudían al Señor.La rudeza de la vida en la frialdad de los riscos,se fue calentando con el amor a Dios y el gozo se contagió en todos los espíritus y brotó una parrquia carismática .Tomó un nuevo cariz la religiosidad popular y se interpreta la naruraleza con toda su belleza y esplendor a la luz de fe renovada sin timideces.Todo ese trabajo en la evangelización que es el propio del sacerdote no basta para que Crscencio vele por las mejoras del templo parroquial que remodeló en sus partes importantes.
Al iniciarse el nuevo período episcopal en la Arquidiócesis se le encomendó la parroquia de la Matriz en Ejido para que despliegue en la tierra de la miel y de las flores su actividad espiritual al ritmo de la renovación.Es nombrado director general de la renovación en la arquidiócesis de Mérida y en dos años se multiplican los grupos de oración por lo largo y ancho de la trasandina .Al llegar a los veinticinco años de su sacerdocio bregados con dureza pero con cariño,traginados por los caminos de la arquidiócesis pero plenos de entusiamo hacemos llegar nuestras congratulaciones al Ministro del Señor que vive la alegría de su fe y es testimonio de sus hermanos.El Espiritu Santo que está actuando en la iglesia nos rejuvenecen y active nuestro sacerdocio con esta efemerides que todos los cristianos celebramos con solemneidad.
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