ENCUENTRO
DE PARROCOS
EN BARQUISIMETO
PAMU
Los sacerdotes reunidos
en el lll ENCUENTRO DE Párrocos en BARQUISIMETO, como integrantes de las
diversas comunidades del país manifestamos nuestra opinión ante la grave
situación de Venezuela Vivimos con los pobladores las consecuencias de un
régimen democrático deteriorado por la
corrupción de los poderes públicos y la opresión internacional de una impagable
deuda externa. Apoyados en las continuas declaraciones pastorales de la jerarquía
episcopal, denunciamos los abusos del poder, los atropellos a la dignidad del
hombre, la inseguridad y el monopolio de los recursos económicos, que conforman
la gran crisis moral.
Como pastores
parroquiales que sentimos y escuchamos de cerca la voz del pueblo, consideramos
indigno del nombre cristiano a quienes validos del poder político se han enriquecido
en forma deshonesta con los recursos del Estado y ahora lo sentimos en los
pésimos servicios públicos y en la escaséz de alimentos .Igualmente consideramos que no merecen el nombre de
cristianos a quienes explotan al pueblo con la inflación desmedida de los precios, el acaparamiento y
la especulación en los artículos de primera necesidad, que provocan el hambre y
la miseria en las familias de menos recursos.
Comprendemos, por lo
tanto, la ira del pueblo, que desesperado por la opresión de los poderes ha
llegado hasta la violencia. Es la violencia de los pobres contra la violencia de
los ricos. Lamentamos las pérdidas de vidas humanas en sus manifestaciones y
nos solidarizamos con el dolor de las familias venezolanas que lloran sus seres
queridos
Repudiamos la represión
de los cuerpos armados que con discriminación han tratado con dureza a los
sectores marginales cuando saquearon un día pero han sido complacientes con quienes han
saqueado al país durante muchos años.
Pedimos encarecidamente
al poder judicial que recobre la dignidad que le corresponde y en este momento
comprenda que una verdadera toma de justicia con los verdaderos delincuentes de
RECADI podría ser punto de partida para un castigo ejemplar a todos los
sectores comprometidos en la corrupción
Urgimos a los
representantes del pueblo en el Congreso Nacional, que con el equilibrio de
fuerzas formadas por el voto popular, legislen a la brevedad las reformas del
Estado Venezolano, para que podamos realizar unas elecciones municipales como
las aspira el consenso nacional-
Ante el vacío de
liderazgo que adolecen los sectores políticos, asumimos responsablemente
nuestro ascendiente tradicional, junto con los laicos comprometidos y en
cooperación presbiteral, para liberar las asociaciones de vecinos del partidismo
y colaborar decididamente en las mejoras que emprendan a favor de las regiones.
Declaramos con la opinión
mayoritaria del país que las medidas implementadas por el gobierno nacional, requieren
de modificaciones, para que no seamos manipulados por organismos
internacionales y miremos especialmente al bienestar de la nación
La cuota de sacrificio
que se pide al pueblo debe tener primero su ejemplo en la cuota de austeridad
que haga el gobierno y su burocracia, así como
principalmente la cuota de restitución que deben hacer los que con su administración desviaron los recursos económicos fuera del país o han
recargado la deuda pública.
Acompañamos a los
trabajadores y a sus organizaciones gremiales en sus justas luchas por la consecución de las reinvindicaciones sociales.
Herederos del
patriotismo de Bolívar en esta hora crucial de Venezuela todos los compatriotas
debemos estar más unidos para la defensa y protección de los valores
nacionales.
Con la fe en Dios y movidos
por el amor a la feligresía queremos ser solidarios en la esperanza y en el optimismo
de tantos venezolanos preocupados, que
por diversos medios luchan para conseguir estos mismos objetivos.
A nombre de todos los
párrocos de la Iglesia católica de Venezuela, hacemos llegar nuestra palabra de
aliento y nuestro apoyo solidario al pueblo cristiano que aspira y desea La paz
en un auténtico desarrollo,
Abril 26 de1989
No hay comentarios.:
Publicar un comentario