GUAYANA LA QUINCEAÑERA

GUAYANA LA QUINCEAÑERA 
PAMU

Para celebrar los quince años de la diócesis de Guayana su obispo Mons. Ubaldo Santana invitó al clero  para realizar su VIII Encuentro de párrocos en Puerto Ordaz. Entramos por la puerta grande de la historia eclesiástica venezolana en el viejo templo de la misión capuchina, que German Gonzalez describiera con lujos de detalles en su conferencia del club Italo-Venezolano. Sacerdotes de diecisiete jurisdicciones eclesiásticas nos reuníamos matinalmente  para alabar al Señor frente a las cascadas del Caroní y al compás estruendoso de la Lluvizna.

Enmarcada la programación en el año Internacional de la Familia  tuvimos la oportunidad de dialogar con la Ministro Pulido Méndez sobre los problemas familiares de la nación venezolana

Diálogo prolongado en la cena de cada familia que nos hospedaba,para saber de sus propios miembros y sentir el calor hogareño de una iglesia naciente en la promoción laical

Las zonas pastorales compitieron en atención para sus colegas  de otras regiones, ávidos por conocer el crecimiento espiritual de una quinceañera en el apostolado obrero de las Empresas Básicas .La experiencia de un diácono en San Félix como  párroco, nos dió la dimensión episcopal en el gobierno de la diócesis. Sus feligreses dieron testimonio de la aceptación  y en su ausencia valoraban el trabajo y la dedicación que su familia entregaba a las labores parroquiales.

Fuimos testigos de la gran colaboración de las empresas siderúrgicas para con los sacerdotes del encuentro nacional,de tal forma que las autoridades municipales y estadales estaban sobrados con la sola presencia de sus alcaldes.
La zona de Upata,Guasipati y el Callao fueron oro en polvo cuando de recibimientos y recuerdos se trataba para el clero nacional.
El padre Orinoco, río de las siete estrellas, nos oyó suspirar en su ribera cuando agradecidos nos apretujamos a los que se quedaban con el sabor del compañerismo y esperar el próximo encuentro en la capital caraqueña
El número de andinos superó , a pesar de la lejanía a sus vecinos orientales y solo lamentamos que ni los maracuchos y corianos podamos contarlos en nuestras aventuras anuales 
Desde ya podríamos trazarnos un  programa para el encuentro de Caracas, que seguramente tendrá trascendencia por el número de asistentes,así como por la temática. 

No estaría mal sugerir un día por la ruta patriótica, con el fin de visitar la Casa Natal de Libertador,el Museo Bolivariano,y el Panteón Nacional,recordando los grandes momentos de la Patria y de la Iglesia.
Tampoco quedaría mal un recorrido gubernamental por el Congreso,Miraflores y la Casona estrechando lazos de amistad con las autoridades actuales.
Y en cuanto al arte y la cultura no podemos venirnos sin una presentación en el Teresa Carreño o en el Municipal o en el Ateneo de Cacaras.
Todo esto se comentaba en Puerto Ordaz y las expectativas van creciendo a medida que los encuentros  sacerdotales van tomando 
forma y cosistencia para la solidaridad clerical.
 Estamos conscientes  de que estos encuentros no son solo turísticos pero tampoco de estudio;el equilibrio establecido en Puerto Ordaz han dado la medida de que en el porvenir se irá fortaleciendo para  atraer a los  que no conocen una integración sacerdotal en el cariño de los hermanos.
Con los medios de comunicación que cuenta la capital será posible una buena promoción  en especial por los medios de comunicación de la Iglesia que llegan directamente a los sacerdotes del país.
Grandes expectativas ciframos en el noveno encuentro sobretodo si los temas y los ponentes sintonizan con el sitio.
Vale la pena dejar una semana la parroquia para convivir sacerdotalmente en algo que no sea un retiro,ni una jornada de estudio,sino un encuentro en el sentido propio de la palabra.
Ahora se ha dado en llamar Pastoral Sacerdotal porque también necesitamos una atención humana ,porque estamos dedicados al trabajo espiritual.
Dios ilumine a los planificadores del próximo encuentro en Caracas para que la mayoría de los sacerdotes del país podamos asistir con entusiamo y reforzarnuestras energías .  
  
Mayo 1994