LAS CASAS DE SANTA EDUVIGES
Santa Eduviges o Hedwig de Silesia, duquesa y religiosa. 25 de agosto (traslación de las reliquias) y 16 de octubre.
Santa Eduviges o Hedwig de Silesia, duquesa y religiosa. 25 de agosto (traslación de las reliquias) y 16 de octubre.
Nació en 1174 en Baviera, Alemania y era hija del conde Berthold IV de Merano. Tuvo tres hermanas:
Inés, Gertrudis (que por su matrimonio con Andrés de Hungría, fue reina y
madre de Santa Isabel de Hungría), y otra de la que se desconoce el nombre, y fue abadesa.
Tuvo cuatro hermanos más: Bertoldo, patriarca de Aquileia; Elberto, obispo de Bamberg;
Otto y Enrique, que heredaría el título de su padre. A los seis años confiaron
su educación a las benedictinas de Kitzingen, con vistas a prepararla para gobernar una casa y esposo.
Aunque Eduviges manifestó querer ser religiosa, a los 12 años se casó con el
duque Enrique I de Silesia. Aunque muy joven, impresionó a la corte por su
sencillez, buen trato, sabiduría y sobre todo, por sus virtudes. A los 13 años
tuvo su primer hijo, que murió al poco de nacer. Sus siguientes hijos fueron
Enrique, Conrado Boleslao, Inés, Sofía y
Gertrudis. La influencia de Eduviges se hizo notar sobre todo en su actividad
caritativa y educativa. Introdujo en Polonia a los agustinos, dominicos,
franciscanos, cistercienses y premonstratenses, a los que confió escuelas y
hospitales. En 1219 terminó su obra más amada, el monasterio cisterciense de Trebnitz, que se realizó
cambiando penas de cárcel por años de trabajo, en consonancia con la gravedad
del delito cometido.
Después de tener su séptimo
hijo, pidió a su marido y obtuvo de él, vivir en castidad, por lo que adoptó
una vida de monja: ayunaba a pan y agua los miércoles y los viernes, visitaba y
pasaba temporadas con las cistercienses, compartiendo sus tareas y oraciones.